Estos días estamos descubriendo zonas de la Ribera (y de otras partes de Navarra) que no conocíamos. Nos ha pasado con algunos rincones de Cascante, Arguedas, Buñuel y ahora Corella.
Te contamos 5 razones para visitar Corella
Corella “la Bella” es un municipio de la Ribera de Navarra rodeado de viñas y olivos, pero también de un montón de huertas, regadas por el río Alhama. Tiene la categoría de ciudad desde que en 1630 le concediera este título e rey Felipe IV.
Nosotras hemos visitado Corella por 5 razones, pero seguro que encontraréis muchas más.
- El barroco corellano
- La Ruta del Alhama y la Ermita del Villar
- El paseo alrededor de la Estanca
- Los bares de pinchos entre palacios
- Una tienda deco que te sorprenderá
1.El barroco corellano
En Corella hay una enorme concentración de palacios barrocos, por lo que su casco viejo ofrece un paseo estupendo, en el que no pararás de mirar hacia arriba. Hay barroco por todos los rincones de la ciudad, lo que nos hace darnos cuenta del poder económico y social que tuvo este municipio en siglos pasados.
Visitas Guiadas en Corella
Visita oficial gratuita al patrimonio histórico de Corella.
Sábados y domingos a las 11:30, punto de encuentro: Museo de Arte Sacro. Visita de grupos al museo, previa solicitud.
Para concertar una visita guiada envía una solicitud indicando el día preferente y el número de visitantes a:
info@guiascorella.com
Teléfono: 611 098 776
Ver ruta patrimonial
Ver guía ilustrada de Navarra
2.La Ruta del Alhama y la Ermita del Villar
La Ruta saludable del Alhama une Corella, Cintruénigo y Fitero, en un recorrido de unos 40 kilómetros que recorre los diferentes paisajes de estos 3 municipios riberos.
Alrededor de Corella, esta ruta cruza por campos de olivos, huertas y choperas junto al río. Y te lleva desde Corella hasta la ermita del Villar o hasta la Estanca, en sendos recorridos muy chulos.
La Ermita del Villar
A las afueras del municipio, en la carretera a Cintruénigo se encuentra la Ermita del Villar, junto a la Hospedería que lleva su mismo nombre. Aquí, los corellanos y corellanas vienen a celebrar una romería quince días después de Semana Santa y la hospedería abre sus puertas para disfrutar de los preciosos jardines que la rodean.
Nuestra ruta sale desde aquí, por cierto. El camino está muy bien indicado, así que cruzamos un arroyo y comenzamos a caminar hacia la vega del Alhama.
3. La Estanca
Remontando el río Alhama, que se va quedando siempre a nuestra derecha, llegamos a Corella por la carretera que viene de Tudela y tomamos el camino la cementerio. Desde allí está señalado el paseo circular de la Estanca de Corella, una preciosa balsa de agua rodeada de olmos, chopos, álamos, acacias, pinos y alguna zona de playa.
Es un paseo perfecto para hacer con niños pequeños, son solamente 2,5 kilómetros. Y hay ardillas, se pueden recoger piñas, bellotas, hojas chulas, tirar piedras a la estanca, observar las aves desde la caseta de observación y hacer un picnic es su zona de merendero. ¿Es un plan chulo, verdad?
4. Los pinchos de los bares corellano
Si ya te ha entrado hambre (tras unos 7 kilómetros caminados a nosotras nos suele pasar ;-)), quizá es el momento de entrar en el casco urbano de Corella para pasear entre sus palacios barrocos, ver la Iglesia de San Miguel y la de nuestra Señora del Rosario, la Plaza del Crucero, el Museo Arrese (Arte Sacro) y entrar en el Casco Viejo a tomar un pincho rico rico en alguno de sus bares.
Nosotras hemos elegido la terraza del Café EStres, uno de los ganadores (y habituales) en la Semana del Pincho que organiza la Asociación de Hostelería de Navarra y en otros certámenes forales y nacionales. ¡Una gran elección! Acompañado de un Vermut Goya, de Bodegas Camilo Castilla, de Corella, que está delicioso (para los que conocéis el Moscatel Goya, es la misma bodega).
5. El Departamento
Una tienda de decoración con mucho estilo. Marta, su dueña, nos muestra siempre sus novedades por Instagram y queríamos aprovechar que estaba abierta para darnos un capricho.
¡Qué cosas más chulas tiene! Decoración navideña (si vais en esta época no podréis evitar llevaros algún detalle para el árbol o el belén), pequeños muebles, lámparas de metal y hormigón, cestas, mantelería, vajillas de porcelana, zona gourmet, velas, ambientadores…
Nos gusta mucho apoyar al comercio local y descubrir tiendas así en los pueblos riberos. Porque ademas, si no puedes pasarte por Corella, siempre puedes ver todo los que tienen en su web, ¡no hay excusa!
¿Os convencen nuestras 5 razones para visitar Corella?
Seguro que tú tienes muchas más y nos las cuentas.
Y para todos los que estáis confinados en Navarra, recordad que la Ribera tiene mucho que ofrecer. ¡Déjate sorprender!
2 respuestas