Septiembre es un mes de empezar cosas. Antes eran los coleccionables, esos que pasado el fascículo 4 casi nadie continuaba (¿conocéis a alguien que completase una de esas colecciones?). Luego la fiebre del gimnasio, ese que había que empezar en septiembre para que la operación bikini no nos pillara con el pie cambiado. Y entonces llegaron los niños y septiembre…
Ahora septiembre es un mes “chungo”: la vuelta al cole cuesta un riñón, aunque no tengamos que pagar libros (la gratuidad navarra, ejem) los cuadernillos son carísimos, el material escolar también, hay que pagar la matrícula de las extraescolares, la piscina, los uniformes… En fin, que cuesta, cuesta. Que me río de la de enero, vaya.
Pero como toca ser optimista, voy con 5 comienzos de esos que apetecen.
- Estrenar agenda. Ahora se hace en septiembre, que mola más. Yo me he pedido esta y para mi vecina, esta. Ambas de Tantanfan.com
- Empezar con un hobby nuevo. O retomar uno viejo… Lo quise hacer en verano, pero creo que otoño es más un “tiempo entre costuras”. Me he suscrito a El Costurero Magazine y a los vídeos de Chita Lou.
- Empezar un libro gordo. De esos que quieres leer y que como tienes menos tiempo, sabes que te va a durar muuucho. En mi caso, he empezado Americanah, de Chimamanda Ngozi. ¡Tiene muy buena pinta!
- Aprender a bailar Lindy Hop. Una pena que se suspendiera el taller que había en el Estaciones Sonoras. Pero lo vamos a intentar con la clase de prueba de la Academia Dance Style (Avenida Santa Ana, Tudela)
- Empezar una serie de esas de muchos capítulos. ¿Juego de Tronos o Mad Men? Ahí estoy, con la duda 🙂